El mundo laboral vive una verdadera revolución en el modo de trabajar, y pasará un tiempo hasta que pueda analizarse las consecuencias certeras de la pandemia en dicho ámbito.

Fueron muchas las cosas que cambiaron en los mercados, principalmente el pase del modelo presencial de trabajo al remoto y más recientemente también al híbrido. Pero poco se habló hasta ahora de las emociones de los empleados de una empresa.

Aquellas ganancias no financieras que obtienen los empleados en una empresa pueden cambiar la percepción de la misma y de su propio empleo. Muchas veces son estas las que determinan que un colaborador acepte una propuesta de trabajo, o que permanezca en un determinado rol o lugar.

En base a esto, aparece un concepto poco conocido hasta ahora, pero que está tomando cada vez más relevancia: el del salario emocional.

Muchas compañías ya trabajan en esta definición, escuchando y priorizando a sus colaboradores en distintos aspectos llegando a dejar de lado la parte económica.

Según una encuesta realizada entre las principales firmas del país, más del 60% de los empleados prioriza actualmente los beneficios emocionales y de bienestar por encima del salario económico.

"En una sociedad donde todo es ya y ahora, el equilibrio entre el trabajo y el tiempo de ocio, o para compartir en familia, se hace indispensable. Es por ello que las empresas prestan cada vez más atención a lo que cada colaborador demanda. Los escuchan y aplican políticas que los beneficien", explicó Vanesa Boulet, Talent Manager de Eventbrite. "En definitiva un colaborador que trabaja contento debido al contexto en el que se encuentra y a partir de los beneficios que sabe que tiene para aprovechar, es aún más productivo y ayuda a cumplir todos los objetivos de cualquier organización", añadió.

Asimismo, y ligado a estos resultados de la investigación, el 100% de los colaboradores cree que los programas de Bienestar tienen un impacto positivo en la productividad de cada uno de ellos.

Dentro de los más valorados por los miembros de cada empresa se encuentran:

• Flexibilidad horaria
• Días libres
• Posibilidad de trabajar de forma híbrida (política potenciada puramente a partir de la pandemia)
• Otros anexos como las capacitaciones, la posibilidad de interactuar con otros miembros de la empresa, el reconocimiento de las personas con las que se trabaja, y la libertad de acción tanto para hacer como para proponer, se vuelven fundamentales ya que es a través de ello que los colaboradores ganan confianza y autonomía.

En ocasiones y sobre todo en tiempos de crisis, el salario emocional puede verse desvalorizado. Sin embargo, que los colaboradores se sientan escuchados permanentemente, y que a partir de ello reciban beneficios para su vida tanto laboral como personal, resulta esencial en estas épocas. La forma en la que se trabaja es, quizás, el gran cambio de la post pandemia. El formato híbrido se instauró en el día a día y parece que llegó para quedarse.

Según el estudio realizado por Jabra, Jabra Hybrid Ways of Working 2021 Global Report, donde se encuestó a más de 5.000 trabajadores en múltiples partes del mundo, el trabajo flexible se convirtió en el principal beneficio laboral (59%) y motor de motivación para los colaboradores, superando al salario.

Los encuestados señalaron que la flexibilidad y autonomía laboral priman sobre las compensaciones económicas:

• La comodidad del hogar y la tranquilidad de llegar a fin de mes
• Un trabajo flexible es la gran motivación de los empleados
• Además, el 73% de los mismos creen que, en un futuro, las oficinas como espacio de trabajo serán consideradas más como un beneficio, que el lugar habitual al que asistir.
• Sin embargo, el 71% de los colaboradores de todo el mundo sigue considerando la oficina como un lugar donde socializar.

Este cambio de actitud hacia el trabajo flexible y el concepto tradicional de oficina puede suponer un nuevo planteamiento sobre los beneficios laborales que las compañías ofrecen a sus trabajadores, ya que deben adaptarse a las nuevas necesidades surgidas tras la pandemia.

La colaboración entre equipos, la motivación y los problemas con las herramientas tecnológicas son las principales razones por las que la gente quiere volver a la oficina. Además, hay encuestados que aseguran que, como la transición del lugar de trabajo de la oficina a casa no fue lo que esperaban, prefieren volver a la oficina.

Algunos encuestados aseguraron que prefieren volver a la oficina ante los problemas que les presenta el home office. De hecho, hay más probabilidades de que los empleados soliciten más días de trabajo en la oficina -3 días o más a la semana- si la transición no fue satisfactoria. Sin embargo, todavía hay un 17% que desea estar en la oficina a tiempo completo.

Mientras que tres de cada cuatro empleados son escépticos sobre la modalidad híbrida debido a las desiguales y a la mala comunicación dentro de las organizaciones.